Olga Ribera Diez o como la llaman sus estudiantes la “Profe Olguita”, es una ceramista nacida en el departamento del Beni, que a lo largo de más de 50 años ha desarrollado una prolífica carrera destacada por su abnegada labor en la enseñanza y su profundo compromiso con el rescate y promoción de la cerámica tradicional del oriente boliviano. Es por tal motivo que el Centro de la Cultura Plurinacional, dentro de su Programa Curatorial de Exposiciones Temporales, rendirá un homenaje a Olga Ribera a través de una exposición que muestre la vida y obra de una de las artistas cruceñas más queridas por diversas generaciones de estudiantes.
Una mujer de barro
En el misterio de la creación reside la pasión de Olga Ribero, ella declara: “La mismísima Biblia atestigua que Dios creó al hombre del barro de la tierra, ¿acaso eso no es maravilloso?”. Para la artista, el barro es uno de los materiales más nobles de la naturaleza, su capacidad de amalgamar y dar forma a la imaginación, dio lugar al arte más antiguo de la humanidad.
La formación de Olga inició el año 1969 en la histórica institución de Bellas Artes, en varias declaraciones públicas ella destaca que tuvo el privilegio de aprender y nutrirse de personalidades como Jorge Chuquimia, Wilfredo Salvatierra, Raúl Otero Reiche, Jorge Rozas entre otros.
Después de su formación en Bellas Artes, inicia una serie de viajes y estudios de formación a lugares que para la joven artista eran de fantasía. Entre las décadas de los 70 y 80, Olga Ribera se hace acreedora de becas en diversos países como Argentina, Italia y México. De aquellas experiencias recuerda con mucho cariño su estancia en la Escuela del Museo de Cerámica de México, lugar donde ella reconoce que sus horizontes se ampliaron y que además fue el momento en el que decidió volver a casa y dedicar todo su bagaje de conocimientos a investigar, promover y revalorizar la cerámica y artesanía de su gente.
Dar y recibir, código de vida
La fascinación de sus viajes fortaleció sus raíces y el deseo de valorizar la naturaleza de Santa Cruz, explorando su fauna y flora para revelar toda la magia de ese verde y tupido paisaje. Sintió que este era su camino, el cual debía cumplirlo por reciprocidad con la vida, por todo lo que esta le había dado.
“Con humildad, a través de las piezas u objetos de arcilla que suelo crear, la intención siempre es transmitir y mantener vigente en el espíritu y la mente del cruceño, pero más que nada en las nuevas generaciones, la valoración, preservación y defensa de lo nuestro, esto es ir al reencuentro con la propia identidad”, declaraba Olga Ribera en una entrevista del año 2020.
Su trabajo de revalorización de la identidad cruceña a través del arte, la llevó de nuevo al lugar donde todo había empezado, y fue en las aulas donde las manos de Olga Ribera moldearon con cariño y dedicación a las nuevas generaciones de ceramistas de Santa Cruz.
Los frutos de su empeño también la llevaron a formar parte de proyectos que tienen un gran impacto cultural en Santa Cruz, hablamos del trabajo que viene realizando en CIDAC –Arte Campo, emprendimiento iniciado por Adita Soto Mayor y Laura Zanini, embarcándose a la aventura de investigar y estudiar la producción artesanal indígena – campesina de Santa Cruz.
“Las huellas de mi trabajo también están en los numerosos diseños que elaboré para CIDAC-Artecampo y que mujeres artesanas de varias comunidades de Santa Cruz reproducen y recrean en las piezas que elaboran y que luego se exponen y ofrecen a la venta en la peculiar tienda de Artecampo”.
El Homenaje
Aún queda mucho por contar, la carrera y experiencia de Olga Ribera es fascinante, sus logros y enseñanzas son hechos que merecen ser conocidos por nuestra ciudadanía. Por este motivo es que el CCP junto a CIDAC – Arte Campo, han organizado una muestra homenaje que recorre la vida y obra de Olga Ribera y que por sobre todo intenta contagiar al espectador de todo el cariño que emana de las manos y obras de esta mujer de barro.
La muestra se inaugura el jueves 17 de noviembre a las 19:30, en la Sala Guarayo del Centro de la Cultura Plurinacional, ubicado en la calle René Moreno #369.